LA PROCLAMA DE PORE EN EL CONGRESO DE ANGOSTURA
Por: Felcer Dueñas Vallejo
El
congreso de Angostura se instaló en Venezuela el 15 de febrero de 1.819, con el
propósito de crear la gran Nación Americana, el propósito central de dicho
congreso, ya había sido discutido con el general Granadino Francisco de Paula
Santander, antes de salir comisionado a Casanare, el año inmediatamente
anterior y en tal orden también estaba claro que, se enviarían los diputados de
Casanare a dicho congreso, en virtud de ser la única provincia libre de la
Nueva Granada.
Santander
llega a Casanare remontando por el Orinoco y el Meta, desembarcando en
Guanapalo el 27 de noviembre de 1818 y rápidamente pasa a Pore capital de la
Provincia, convencido como nuca antes, que la gesta libertadora llegaba a su
parte final y que era necesario, como el mismo Santander lo relata en sus
cartas, dar orden jurídico-administrativo y militar a la provincia.
Con
fecha 24 de febrero de 1819, Santander escribe desde La Laguna, al Consejo
de Gobierno, y después de hablarles de la tranquilidad interior y exterior de
la Provincia de su mando y del entusiasmo de sus habitantes, anhelosos de
contribuir a la libertad de sus compatriotas agrega:
“Muy
tarde recibí el Reglamento para la elección de Diputados al Congreso General de
Venezuela. Actualmente se están celebrando…Luego que se concluya y resulten
nombrados los Diputados, tomaré las más eficaces providencias para su inmediata
incorporación en el Congreso”
Los
delegados de la diputación de Casanare, señor Coronel José María Vergara y
Teniente Coronel Vicente Uribe, se presentaron el 12 de junio de 1819 según
Acta N° 93 firmada por Roscio como Presidente y como Secretario el
Diputado Diego Vallenilla y nueve días más tarde, según acta Número 100 del 21
de junio de 1819, el Diputado Casanareño Vergara, pidió la palabra y dijo: “pues
que sus proposiciones, que se suspenda el proyecto de Constitución, hasta que
puedan tener parte en ella los pueblos de la Nueva
Granada y se restablezca el Gobierno Provincial… no estaban aún
resueltas esperaba se examinasen en segunda discusión, como se verificó,
acordándose que la última, por la urgencia que estaba declarada esta materia,
se tuviese en el día de mañana”
Se
puede establecer claramente que los Diputados de Casanare presentaron esta
propuesta al tenor de lo dispuesto en un documento conocido como la Proclama de
Pore, en cuyo artículo 11 establece claramente lo siguiente: “Artículo
11.- Renovará y estrechará la alianza entre la Nueva Granada y la
República de Venezuela, solicitando su cooperación para el establecimiento de
nuestra libertad y celebrando todos los pactos y convenios que estime convenientes,
hasta que congregado el Congreso se acuerde por ambas partes si deben reunirse
en un solo Estado y qué Gobierno debe adoptar, el tema se vuelve a mencionar en
el Acta N° 100 del 28 de junio que dice: La comisión encargada de formar un
manifiesto sobre la importancia que debe resultar a la consolidación de nuestra
independencia, la unión entre La Nueva Granada y Venezuela, presentó una
proclama que estimaba conveniente precediese a la publicación de dicho
manifiesto; y después de una ligera discusión se acordó volviese la proclama a
la misma Comisión para que, según las observaciones que se le hicieron, le dé
más extensión.
Los
diputados de Venezuela que eran mayoría por supuesto, se empeñaban en proclamar
la constitución Venezolana a como diera lugar y en efecto el 11 de agosto de
1819, se dio lectura y aprobación a la Constitución Venezolana, haciendo caso
omiso a las proposiciones de los Casanareños, tan solo cuatro meses después,
ante la majestuosidad de los hechos ocurridos en la Nueva Granada por el
triunfo del Ejercito Patriota, una vez presente en Angostura el Libertador
Bolívar, el 17 de diciembre de 1819, ese mismo congreso expide la Ley
Fundamental de la Republica de Colombia, que crea la unión de
Colombia y Venezuela y convoca al congreso de Cúcuta, para 1 de enero del año
de 1821, donde participen todos los diputados de las Provincias de La Nueva
Granada, conforme a la proposición, que tanto defendieron los diputados
Casanareños, que finalmente prevaleció y se impuso a la luz de los acontecimientos.
Hacemos
énfasis que el documento, La Proclama de Pore, cuyo borrador fue encontrado en
los legajos del general Santander, contenía la visión política de los diputados
casanareños en el Congreso de Angostura, a donde fue expuesta, por nuestros
ilustres representantes, que defendieron sus postulados y propósitos ante un congreso
mayoritariamente venezolano.
El
documento (Proclama de Pore de 1818) es mencionado inicialmente por el padre
del derecho constitucional Colombiano, doctor Carlos Restrepo Piedrahita en su
libro “Constituciones Políticas Nacionales de Colombia” edición 1995 y
es el fundamento de la obra “Al solio de Moreno el presidente llanero”,
ediciones 2009 y 2018 en la cual el abogado Pedro Nel
Pinzón Güiza, considera que el documento,
es la Constitución del Estado Llanero y que a su vez, llevó al general Casanareño de la Independencia Juan
Nepomuceno Moreno, a ejercer la
presidencia interina de la Nueva granada, desde el 18 de diciembre de 1918 al
10 de septiembre de 1819.
La
proclama de Pore, es sin duda estructurada y redactada en su totalidad, por el
General Santander, personalmente tuve la oportunidad de leerlo, en las carpetas
microfilmadas de Archivo General de la Nación, pero es importante dar a conocer
que, se mantiene una encarnizada confrontación, entre quienes no comparten esta
interpretación del abogado Pinzón en su libro y los afectos a esta nueva tesis,
que debe ser analizada con mayor profundidad definitivamente.
Como
casanareño, debo aclarar que, el tema despierta todo mi interés, como
apasionado a la historia y orgulloso de nuestra llaneridad, me compromete a
sumarme a la investigación del asunto; pero es mi responsabilidad consignar
también, que carezco de elementos de juicio, que me permitan acogerla o
rechazarla por completo, máxime cuando mi labor de investigador, aunque empírico,
me exige, que debo contar con documentos certificados, que lo confirmen o rechacen,
más allá, de toda duda razonable.
He escuchado
atentamente al autor Pedro Nel Pinzón, pero en contraparte, también a personalidades
del más alto nivel de reconocimiento y trayectoria nacional, entre ellos al
doctor Luis Horacio López Domínguez, oponerse abiertamente a esta
interpretación.
Por
otra parte, considero prudente analizar el siguiente documento fechado el 18 de
mayo de 1819 en Tame que dice: Antonio Morales, Teniente Coronel del ejército,
subjefe interino del estado mayor general del (ejercito) libertador de la Nueva
Granada, y etcétera.
“Certifico:
Que
los días 13 y 19 del corriente, previas ordenes necesarias se hallaron en las
plazas públicas de Manare y Tame formados los batallones 1° de línea y 1° de
Cazadores del ejercito de vanguardia libertador de La Nueva Granada y habiendo
pasado la orden de parada se presentó en su frente de parada el señor general
de brigada, comandante general de la vanguardia de dicho ejercito Francisco de
Paula Santander, el Estado mayor y varios otros oficiales desnudando su espada
con los demás de su acompañamiento dijo: “Señores oficiales, soldados: El
excelentísimo señor general Simón Bolívar ha abdicado la suprema autoridad que
las circunstancias habían depositado dignamente en sus manos en un congreso formado
con legitimidad por el voto de las provincias libres de Venezuela y la de
Casanare, única que entre las de La Nueva Granada no siente hoy los horrores de
la servidumbre. El congreso ha elegido por presidente del gobierno al
excelentísimo señor general Simón Bolívar, a este hombre cuyo desinterés y
virtudes ha oscurecido la gloria de los que antes de él había respetado la
antigüedad; a este hombre grande delante de las naciones, más grande delante de
los pueblos, a quien con su espada ha roto la cadena, grande delante de los
sabios, grande delante de sus conciudadanos, y solo pequeño delante de sí
mismo; a este hombre que en la orfandad granadina ha recibido nuestro
desgraciado país bajo su protección, a quien debemos armas, municiones, a quien
somos deudores del estado brillante y respetable en que hoy se halla este
ejercito a cuya sola vista acabáis de ver huir las soberbias columnas
españolas. Y puesta la mano sobre la guarnición de su espada, seguido su
ejemplo por los jefes y oficialidad, continuó: ¿Juráis a Dios y prometéis
bajo vuestra palabra de honor reconocer, obedecer y respetar al excelentísimo
señor general Simón Bolívar como presidente del gobierno de la Republica entre
tanto que se liberta La Nueva Granada y los pueblos establecen libremente el
sistema de gobierno que crean más conforme a sus derechos? La oficialidad y
tropa contestó: si juramos. Entonces el señor general y su comitiva envainaron
la espada y el aire se pobló de alegres y repetidos vivas al excelentísimo
señor presidente, al bravo general Bolívar, al protector de Nueva Granada y
genio tutelar de la libertad. La tropa al retirarse dio las vivas al señor
general de la vanguardia de Casanare. Una alegre diana precedió a su marcha a
los cuarteles y desde el general hasta el soldado parece no podían pronunciar
el nombre del nuevo presidente sin derramar lágrimas de reconocimiento y
alegría.”
A
todas luces, este juramento enviste como en presidente al General Bolívar, sin
hacer mención a la Proclama de Pore, entendemos que se vieron obligados por circunstancias
apremiantes, durante los días 13 y 19 de mayo de 1819, en los cuarteles de Tame
y Manare respectivamente, según documento certificado.
Se
justifica esta acción, para unificar el poder en la persona del Libertador, que
venía envestido como presidente de Venezuela y dado el prestigio que contaba
Bolívar en ese momento, era necesario envestirlo de la máxima autoridad, como
comandante en jefe de los ejércitos patriotas, por otro lado, la rapidez con
que acaecieron los hechos, llevó a que Bolívar abandonara el país (Venezuela)
sin el permiso respectivo del congreso, impase que se subsana a posteriori, según
acta 112 del 8 de julio de 1819, en la lejana Angostura.
Así
las cosas, Bolívar asume una presidencia de facto, a beneplácito del General
Santander, el hombre con el poder militar en mayo de 1.819 en las llanuras de
Casanare y se perfeccionó con el decreto del Libertador, el 10 de septiembre de
1819 en Santa Fe de Bogotá.
Pero
el legado de los diputados de Casanare en Angostura, se eternizó junto a la
América libre y las praderas verdes del suelo casanareño, su espíritu unionista
prevaleció y en el congreso de Cúcuta de 1821, participaron representantes de
todas las provincias de La Nueva Granada.
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Bibliografía:
ANDRES MONTAÑA
(Compilador) Santander y los Ejércitos Patriotas ISBN: 958-643-000-6 1989
Edición digital.
Pedro Nel Pinzón Güiza.
Al Solio de Moreno el Presidente Llanero de la Independencia. Edición 2009-2018.
Proclama de Pore.
CERVANTESVIRTUAL BIBLIOTECA.
Roberto Cortázar y Luis
Cuervo. Congreso de Angostura. Libro de Actas. Academia Nacional de Historia.
Imprenta Nacional. Bogotá 1921.
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